La pota, también conocida como calamar gigante, es una fuente rica en proteínas que aporta al crecimiento de los niños y a su desempeño físico.

“Cien gramos de pota aportan 16 gramos de proteínas, por encima de carnes rojas como el cerdo, que aporta 14,4 gramos, lo que la convierte en un alimento importante dentro de una dieta balanceada”, explicó Liliana Vargas, nutricionista del Programa Nacional “A Comer Pescado” del Ministerio de la Producción.

Agregó que los niños por estar en edad de crecimiento y realizar actividad física constante deben consumir pota, pues esta contribuye a la formación y regeneración de tejidos, así como al mantenimiento de la masa muscular.

La pota posee además Omega 3, fósforo, hierro, calcio, zinc, potasio, magnesio, vitaminas A, C y vitaminas del Complejo B, las cuales contribuyen al metabolismo, es decir ayudan a convertir los alimentos en energía.

Asimismo, contiene taurina, un aminoácido que tiene múltiples funciones, como regular la presión sanguínea, disminuir la formación de coágulos en las venas, mejorar la visión y la visibilidad nocturna, además de actuar como antioxidante.

“Este producto está al alcance de los bolsillos de las amas de casa y es muy versátil para cualquier preparación, siendo una opción ideal en el desayuno, almuerzo y cena, por ser de fácil digestión. Se recomienda en preparaciones como: guisos, estofados, salteados orientales, cebiches, entre otros”, indicó Vargas.

Para rebajarle la acidez a la pota, solo es necesario hacerle un corte por el medio (tipo lonja) de tal manera que se reduzca su grosor, pasarla por agua hirviendo con sal y luego refrescarla en agua limpia.

El público puede acceder a recetas de pota y otros ingresando a la página web: .

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