Realizar ejercicios físicos es fundamental para tener un trasero firme y tonificado, pero no es lo único: la alimentación afecta directamente a esa zona del cuerpo.
Cuando las proteínas no se toman en cantidades idóneas pueden aparecer distintos problemas de salud, pero en lo estético hay uno muy característico: la flacidez muscular. Eso significa que diversas zonas del cuerpo pierden firmeza y adquieren un aspecto fofo, caído.
Ingerir proteínas en una adecuada proporción hace que los músculos en general y los glúteos en particular se fortalezcan, con lo que la figura se tonifica y adquiere una bonita forma. El consumo de carne, pescado y huevos son claves, ya que son los alimentos más proteicos, base de la estructura de nuestro organismo y también de los músculos.
Las bases de la dieta
Si además de saber qué alimentos son los más indicados para tus glúteos, quieres que ganen firmeza, pon en práctica esta dieta. De paso, te servirá para perder algún kilo de más.
Ejemplos de menús:
Desayuno
Un tazón de cereales con leche descremada y una pera en trocitos.
Media mañana:
Un jugo de naranja.
Almuerzo:
Sopa de verduras, fideos con tomate, una porción de queso fresco.
Merienda:
Una manzana (mejor con cáscara)
Cena:
Champiñones al horno, un bife de vaca o pavo a la plancha, una infusión de manzanilla.