Todas las hemos oído hablar alguna vez a especialistas, que el descansar bien o el dormir lo suficiente, por un determinado tiempo de horas, potencia la capacidad de retención de nuestro cerebro, mejora el estado de ánimo, el rendimiento físico y despierta nuestra vitalidad.

Esto debido a la calidad y al número de horas de descanso que le damos a nuestro organismo. A ello, se le ha sumado otro interesante factor: la posición. Pues, según diversos estudios realizados al descanso, el dormir de una determinada posición no solo contribuye a un mejor funcionamiento de los órganos, sino que, además, nos mantiene jóvenes.

Esto, según un artículo publicado en el portal web Hola, en el que se indica que el (lado del corazón) frena los efectos del envejecimiento, como la aparición de arrugas, y, por consiguiente, mejora nuestra salud física.

Asimismo, resalta los estudios realizados por la , en el que se señala que el dormir del lado del corazón mejora nuestro estado de ánimo, manteniéndonos mucho más activas y alegres, estados que tendrán un efecto positivo en la apariencia de nuestra piel.

Dentro del artículo, se explica también que el dormir del lado izquierdo puede disminuir el riesgo de sufrir enfermedades neurológicas como el Parkinson o el Alzheimer, ya que esta postura mejora el sistema glinfático, el cual es el encargado de eliminar los desechos del sistema nervioso. Esto, de acuerdo con un conjunto de análisis realizados por universidades de New York y publicados en Journal of Neuroscience.