3 recetas con mandarina para lucir una piel increíble

Lima, 29/08/2016, 10:28 a.m. | Actualizado 29/08/2016, 08:10 a.m.

Existen muchos productos para lucir una piel perfecta; pero la mayoría de estos tienen muchos compuestos químicos. La mejor fórmula son las recetas hechas a base de productos naturales, entre ellas tenemos a la mandarina .

Esta fruta no solo es buena para la salud, sino también tiene otros beneficios, por ejemplo, previene el envejecimiento y ayuda al crecimiento del cabello.

Aquí te dejamos 3 recetas con mandarina para tener una piel perfecta:

1.- Elimina las manchas de tu rostro

Si tienes una piel con manchas, la mandarina será un gran aliado.

¿Qué necesitas? ¼ taza de leche caliente, 1 cucharada de levadura, 1 mandarina, 1 rebanada de pan.

Preparación: primero extrae el zumo de la mandarina y mézclalo en un recipiente con la leche, añade el pan en varios trozos y luego incorpora la levadura. Tras obtener una pasta cremosa, aplícala por todo el rostro, déjala actuar durante 20 minutos y enjuaga. Puedes usarla hasta tres veces por semana.

2.- Para hidratar el rostro

Si deseas tener una piel suave al tacto y con un semblante joven y fresco prueba esta receta:

¿Qué necesitas? 5 cucharadas de avena, 5 cucharadas de miel, 1 cucharada de aceite de oliva, 1 mandarina.

Preparación: extrae el zumo de la mandarina y mézclalo con la avena, la miel y la cucharada de aceite de oliva. Tras formar una pasta espesa, aplícala por todo el rostro, cuello y escote, mediante suaves masajes circulares para exfoliar. Déjala actuar durante 10 minutos y enjuaga. Úsala dos o tres veces a la semana.

3.- Para el tratamiento de puntos negros

Los puntos negros aparecen a causa de la exposición a las toxinas del medio ambiente.

¿Qué necesitas? 3 cucharadas de vinagre de manzana, 3 cucharadas de agua caliente, 1 mandarina.

Preparación: mezcla en un recipiente el vinagre de manzana, el agua caliente y el jugo de la mandarina. Sumerge un trozo de algodón y frótalo sobre las áreas del rostro que deseas tratar. Déjalo secar y enjuaga con agua fría. Recuerda usarlo en horas de la noche, cuatro veces por semana.