Está todo fríamente calculado. Gustavo Quinteros, seleccionador de , sabe que sus opciones de salir airoso ante este martes 5 de setiembre en Quito por Eliminatorias Rusia 2018 pasan por sacar del partido al goleador incaico, y por ello ideó este plan que no solo es táctico, sino también psicológico gracias al famoso temperamento del ‘Depredador’.

Paolo Guerrero tiene una gran fama mundial como goleador, pero también es conocido por su temperamento que es un arma de doble filo: le hace entregar hasta la última gota de sudor en el partido y meter la pierna cuando parece que no llega, aunque si lo incomodan, puede tener un efecto nocivo y sacarlo del partido a punta de rabietas.

Por ello, Quinteros enviará a dos jugadores para marcarlo en la zona de ataque: Gabriel Achilier y Robert Arboleda se encargarán de anularlo en ataque o al menos lo intentarán.

Claro, no solo harán eso. La presión será fundamental, buscarán provocarlo para que se gane la amarilla y, porqué no, la roja. Esto no solo puede generar un efecto de rabia en Guerrero, sino también de temor. Las primeras bolas que toque el delantero del Flamengo serán importantes. Es ahí, cuando el defensor debe imponer su presencia, pero tendrá un ingrediente especial: pierna fuerte para meter miedo al peruano.

Ahora bien, Paolo Guerrero no es un juvenil. Como capitán, tiene la experiencia necesaria gracias a sus mil batallas en la cancha a altísimo nivel, tanto en selecciones como en clubes. Pero su temperamento, su temperamento…

Ricardo Gareca ya le habrá advertido al ‘Depredador’ de no caer en la provocación. No solo a él, sino al resto de jugadores. No solo con buen fútbol se gana, también con la cabeza.