Cuando termina el año, dejamos atrás nuestros malos hábitos: el sedentarismo, el cigarrillo, comer en exceso y la bebida, son algunos de los más comunes. Con la llegada de enero, empiezan las promesas y las metas, entre las que se encuentran estar .

Si bien las primeras semanas del año, los centros de entrenamiento y las calles alcanzan una mayor afluencia, en búsqueda de cumplir con los propósitos deseados, después de un tiempo, las rutinas, el trabajo, la familia, entre otras ocupaciones, empiezan a desplazar, poco a poco, el objetivo de estar en forma, ya que el tiempo que, normalmente, requiere una actividad física con disciplina, supera el que podemos dedicarle o, por lo menos, eso pensamos, volviéndose la principal excusa.

Sobre este tema, Nayla Halaby, experta del centro de entrenamiento con electroestimulación muscular, Fast Fit, habló sobre la importancia de realizar rutinas más efectivas y menos largas, asegurando que “cuando se realiza un entrenamiento inteligente, bien pensado y diseñado según las necesidades particulares de cada deportista, no hay razón para aburrirse, ni mucho menos, para gastar demasiado tiempo en ella”, afirmó.

Asimismo es válido apoyarse en el uso de tecnologías que garanticen el cumplimiento de los objetivos en menor tiempo, “cada vez hay más desarrollos tecnológicos orientados al cuidado de la salud, que con la asesoría de profesionales certificados y un programa de nutrición adecuado, acelerarán el logro de las metas propuestas, lo cual ayuda a mantener elevados niveles de motivación, por los rápidos resultados en el poco tiempo invertido”, afirmó.

Sobre esto, es recomendable considerar el uso de técnicas de entrenamiento como la electroestimulación muscular (EMS), debido a que refuerza los ejercicios realizados y potencializa los resultados. En este caso, lo más importante es conocer la intensidad de los estímulos y el rango en el que trabajan los diferentes músculos, y asegurarse, más allá de las repeticiones o el tiempo, que se trabaje en todo momento en favor de nuestros propósitos y nuestra comodidad.

Para la experta, es indispensable combinar, acertada y equilibradamente, las diferentes fases del entrenamiento, de manera que, con la tecnología adecuada, en 20 minutos máximo, se consigan los objetivos propuestos, como bajar de peso, ganar masa muscular o mejorar el rendimiento físico. “Para esto, se debe tener en cuenta la tensión a la que se somete al músculo, las repeticiones, el tiempo entre las series, la carga y el descanso, que es importante para que el organismo se recupere y realice los procesos de adaptación necesarios” dijo Nayla.

Finalmente, según estudios realizados por especialistas de la Universidad de Copenhague en Dinamarca, al realizar media hora de ejercicios, o menos, se queman más calorías de lo que deberían, ya que se concentra toda la energía en este periodo de tiempo. Lo que se explica, en parte, porque se acumula más energía y ganas que quienes dedican un tiempo de ejercicio mayor.

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