Se tuvieron que sortear varias dificultades. Fue una lucha difícil, cuesta arriba, de más de 50 años. Cuando en 1955 se fundó el Instituto de Arte Contemporáneo (IAC), pensando en las corrientes de ese estilo que marcaban la época, uno de sus principales proyectos fue construir un museo. Sin embargo, problemas económicos y políticos, no permitieron que se concrete.

Hace cerca de 10 años, un terreno en Barranco pudo servir para que el sueño se realizara, y se construyó el primer Museo de Arte Contemporáneo de Lima. Sin embargo, problemas de toda índole impidieron su apropiado uso. Ahí estaba, todos lo vimos, enrejado, con carteles de disputas y más. Pero la espera terminó. Desde este 24 de enero, tres muestras nuevas se suman a la colección ya existente, para inaugurar el MAC – Lima.

Con 3 espacios dedicados al arte, lagunas como espejos de agua y un ambiente moderno y bien diseñado en el Parque de la Confraternidad de Barranco, el MAC por fin puede recibir visitantes y ser lo que siempre debió ser, un museo.

Oveja Negra