Sobre el escenario, un luchador enmascarado está preparado para enfrentar a su rival. El público está impaciente por ver su técnica, sus movimientos, la habilidad con la intentará vencer a su enemigo. Entonces, el reloj se pone en marcha y el luchador comienza a teclear en su laptop las palabras que, proyectadas en una pantalla gigante, le darán forma a la historia que presentará, el golpe mortal literario con el que busca noquear al contrincante.

Esta es la dinámica de LuchaLibro, una fantástica idea para buscar nuevos escritores. Esta mezcla de performance, lucha cuerpo a cuerpo y concurso de literatura es un formato fresco, que ha atraído la atención de los escritores y cada año, en los tres que se viene realizando, va ganando más adeptos y postulantes. Este año la convocatoria ya se abrió, y permanecerá así hasta el 31 de mayo, cuando se elegirán a los 32 participantes que buscarán el trofeo y la publicación de sus libros.

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