El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef) denunció hoy que más de 180 millones de personas en países afectados por conflictos no tienen acceso a agua potable y destacó el líquido es “un derecho, no un privilegio” para los niños.

“En los países asolados por la violencia, el desplazamiento, el conflicto y la inestabilidad, los medios más básicos de supervivencia para los niños —como el agua— deben ser una prioridad”, urgió Sanjay Wijesekera, responsable de agua, saneamiento e higiene de Unicef, en un comunicado enviado a la prensa.

Fuente: EFE