En esta ocasión los culpables no son el estrés, los problemas conyugales o la falta de forma física, sino factores totalmente externos y que tienen fácil solución. Te presentamos algunas de las razones por las que cada vez te apetece tener menos sexo.

Comer mucho en la noche:

Si te has dado todo un homenaje cenando te va a apetecer todo salvo pasar una noche de pasión en la cama. Así que si quieres estar en plena forma y darlo todo en la cama, opta por una cena bastante ligera.

*Siempre haces las mismas cosas:

En el sexo también existe la rutina eso pasa por hacer siempre lo mismo. Y cuando actuamos en algo de forma automática y sin pensar, haciendo siempre lo mismo, llega un momento que perdemos el interés por eso. Debes innovar y para ello puedes hacer mil cosas: cambiar de hora o de lugar, experiencias nuevas, incorporar artilugios o juguetes sexuales y hacer realidad tus fantasías más ocultas.

Te queda pequeño:

Probablemente por consumir tanto porno o haber puesto en práctica de forma muy seguida diferentes fantasías sexuales, vuelves a la rutina del sexo tornándose aburrido.

Todo es más importante que el sexo

El sexo ha quedado en último lugar de tu lista de preferencias, viéndose superado por otras cosas como películas o series, un libro que te tiene enganchada, las muchas horas que estás conectada en el messenger o por facebook; cuando llegas a la cama o bien tu pareja ya se ha quedado dormida o llega a ti el agotamiento por un día complicado.

TAGS RELACIONADOS