Hay quienes tienen relaciones sexuales apenas se levantan, antes de desayunar o de lavarse los dientes. Otros, lo dejan para el reposo de la siesta después de comer y una gran mayoría opta por la sensualidad de la noche. Más allá de los gustos, ¿cuál es el mejor momento para el sexo?

“Si nos basamos en los ritmos hormonales que varían a lo largo del día podemos concluir que los mejores horarios son por la mañana, cerca de las 9, y por la tarde, alrededor de las 4”, declara Walter Ghedin, psiquiatra y sexólogo.

En la mañana el nivel de melatonina, la hormona del sueño, es muy alto y la temperatura corporal es baja. El “mañanero” es mejor cerca de las 9 ya que aumenta la oxitocina y la testosterona, ambas hormonas estimulantes del deseo. Si además el sueño fue reparador, el cuerpo está mejor dispuesto para el encuentro.

La siesta es el otro momento ideal para el sexo. Después de comer, el deseo de varones y mujeres vuelve a concordar. “Contribuyen los niveles bajos de melatonina y cortisol, hormona asociada al estrés, durante la tarde”, explica el sexólogo, que aconseja que el almuerzo previo sea liviano y ligero en alcohol.