Luis Suárez conmovió el Mundial de Brasil con dos goles a Inglaterra y un espectacular regreso 28 días después de una operación de rodilla. La determinación y voracidad goleadora del delantero uruguayo desataron elogios en todo el mundo, pero son además el contrapeso de una historia más sensible, la de un joven que decidió ser futbolista por amor.

Suárez, uno de los delanteros más temidos del mundo y máximo goleador de la Premier League, se convenció de que podría ser futbolista cuando tenía 15 años y recibió los consejos de Sofía Balbi, quien entonces era su novia y con el tiempo se convirtió en su esposa y madre de sus dos hijos, Delfina y Benjamín.

Cuando Sofía, que tenía 13 años, tuvo que mudarse a Barcelona para seguir a sus padres, Suárez sumó otra razón para terminar de dedicarse al fútbol. Como pertenecía a una familia de bajos recursos económicos, la única posibilidad de volver a ver a su novia era convertirse en futbolista profesional y ser vendido a Europa.

Ya en en Holanda, su primera etapa en el fútbol europeo, Suárez viajó a Barcelona para pedirles a los padres de Sofía, que todavía era menor de edad, que la dejaran irse a vivir junto él en Groninga, la ciudad en la que jugaba su primer club, el Groningen. “Fue un día inolvidable para mí. Les agradezco a mi familia y a todos los que me apoyaro”, dijo Suárez el viernes por la noche, 24 horas después de su sensacional actuación ante Inglaterra.

“A los 13 años, cuando estaba en las juveniles de Nacional, no tenía muchas oportunidades. Cometí el error de juntarme con gente que no me tenía que juntar y de salir por la noche”, contó Suárez a ESPN Brasil en un especial publicado en noviembre de 2013, después de que Uruguay consiguiera su clasificación al Mundial. “Después tuve la suerte de conocer a mi novia, que fue un golpe para mí, para mi vida y para mi cabeza”, aseguró.

Cuando el periodista le recordó el dicho de que “detrás de todo hombre hay una gran mujer”, el pistolero sensible asintió: “Sí, es lo que se dice y estoy muy contento. Y por los hijos maravillosos que me dio”.

“Antes era un adolescente que salía y que no me gustaba entrenar, pero cambié casi todo cuando me puse de novio”, reconoció. Al año siguiente, cuando Luis tenía 16 y jugaba en la Tercera de Nacional, Sofía se fue a vivir a Europa. “Él se sintió perdido y se dijo que tenía que conseguir llegar al fútbol profesional. Tenía que ser tan bueno como para que lo ficharan en Europa”, reconstruyó Lissardy tras una entrevista con el propio jugador.

Suárez debutó en Nacional a los 18 años y en pocos partidos consiguió su primer objetivo: irse jugar a Europa. Enseguida logró el segundo: vivir junto a Sofía, primero en Holanda y a partir de 2011 en Inglaterra.

Fuente: ABC/Fotos: Getty Images