“Tengo pacientes que dedican de cuatro a cinco horas de la madrugada a jugar videojuegos. Llegan del trabajo, cenan, y después se instalan en el juego”, asevera Claudia Sotelo, psicoanalista del Instituto de Investigación en Psicología Clínica y Social de México.

Así, debido a la adicción de sus parejas, las mujeres experimentan desesperación y frustración. “Se sienten poco queridas, lo cual tiene un impacto negativo en su autoestima”, advierte Lucía Hefferan, pedagoga de la Universidad Panamericana.

Un estudio de la Universidad de California reveló increíbles resultados, 100 hombres fueron escogidos para participar en dicho estudio, el cual consistía en 2 pruebas: la primera era jugar un rato a juegos como Mario Galaxy o Gears of War, mientras que la segunda parte consistía en tener relaciones sexuales con sus respectivas parejas durante 30 minutos.

Después de estudiar los resultados, estos demostraban que un 67% se lo pasaban mejor con el Play Station que teniendo “sexo” con sus parejas; el dato curioso es que sólo el 18% lo admitió.