Posiblemente hubo muuucho drama: lloraste, gritaste, te azotaste, maldijiste y juraste no volver a repetir ese gran “error”.
Pero, ¿qué pasa cuando el susodicho regresa con una mano adelante y otra atrás a decirte que siempre sí?, ¿cómo debes reaccionar cuando se da cuenta de que no encontrará a otro partidazo como tú?, ¿qué hacer cuando regrese arrepentido a rogar por tu perdón?
¿Volver o no volver? ese es el dilema.
Lo más seguro es que tus amigos, papás, abuelita y hasta tu perro lo odien y hagan todo lo posible para convencerte de que regresar será tu perdición. Pero, como tú eres una optimista (o una tonta) que jura que será diferente y que está vez el amor triunfará, decides aferrarte e intentarlo de nuevo.
Total, más vale malo conocido que bueno por conocer. Dicen.
Aquí no vamos a intentar hacerte cambiar de opinión. Todo lo contrario: te diremos por qué sí merece la pena intentarlo (con sudor en la frente y el puño en alto).
Eso sí, no nos hacemos responsables en caso de que estés encaprichada con un patán y te vuelva lastimar. Para esto, ten en cuenta los motivos más comunes que te hacen volver con tu ex:
-Porque nadie más te invitó a salir y no quieres ser una forever alone por el resto de tus días.
-Porque ya te sabes sus contraseñas, así que no tienes que empezar de cero el camino al stalkeo.
-Porque pueden recuperar las amistades de Facebook y volver a frecuentar los mismos lugares sin miedo a encontrarse.
-Porque ya conoces sus mañas, malos hábitos y vicios, así que no te sorprenderás al ver que ronca como oso o que fuma como si no hubiera un mañana.
-Porque ya conoces sus gustos. No tendrás que tener esa platica insulsa sobre su color, helado o películas favoritas.
-Porque ya pasaste por el primer beso incómodo, aquel en que no sabes dónde poner la lengua y las manos.
-Porque también ya tuvieron su primera vez que, normalmente, no es la más placentera.
-Porque ya sabe cómo hacerte llegar al clímax, así que se pueden ahorrar toda la chamba de descubrir lo que funciona y lo que no.
-Porque ya se conocen desnudos, ya dejaron la pena y las sorpresas desagradables.
-Porque ya no tienes que arreglarte tanto, ya te conoce como eres.
-Porque soporta tu síndrome premenstrual con tus cambios hormonales que incluyen bipolaridad, enojos y sentimentalismo sin razón aparente. Tu genio de siempre, pues.
-Porque es tu primer amor, y estás empeñada en que sea para siempre.
Por Melissa Moreno