La aventurera. Estas mujeres son aquellas que no soportan la monotonía, manteniéndose en constante transición. Son capaces de buscar trabajos que las mantengan ocupadas trasladándolas a diferentes puntos. Les encanta planear visitas a distintos lugares y, sobretodo, invertir su dinero en viajes. Comprometerse con alguien es solo sinónimo de pérdida de tiempo.

La resentida: Aquella chica que pasó por una decepción amorosa y decidida a esconder sus sentimiento por un largo tiempo. Prefiere no ser denominada de “solterona” y puede ser capaz de irritarse con todo el mundo, afirmando que el amor es una traba, alejándose de toda aquella persona que celebra la dicha de estar enamorada.

La romántica: La clásica soñadora que espera con ansias al príncipe azul, aunque tampoco sea una prioridad inmediata. Es de las mujeres que espera que su historia tenga la misma trama que las novelas y películas.

La tradicional: Por lo regular, son mujeres mayores de 35 años. Pueden tener relaciones amorosas aunque nunca se presenta la oportunidad para formalizar con alguien en particular.Con el tiempo se acostumbran a vivir con la misma persona y nadie más.

La independiente: Es de las que piensan que el compromiso es reflejo de ataduras, un hecho que prefieren no experimentar por el momento. Prefieren realizar sus cosas sin tener que rendir cuentas a nadie.

La que no tiene prisa: Básicamente chicas jóvenes que no pretenden correr riesgos sin querer comprometerse seriamente con algún muchacho, considerando que es necesario conocer a más personas para finalmente elegir.

La que no tiene ataduras sexuales: Es la típica mujer que cuestiona el hecho de que no es necesario atarse a un solo hombre, pues hay variedad de donde elegir. Saca a relucir su lado más sexy sin poseer algún tipo de prejuicio en cuanto al tema del sexo.

Sola pero acompañada: Se trata de aquellas mujeres que se enamoraron de alguien sólo por su billetera. Con el transcurrir del tiempo, se han acostumbrado a estar solas, eso sí, con un hombre a la distancia que está ahí únicamente para complacerlas en todo.

La profesionista: Son en muchos casos las mujeres que prefieren casarse con aquel trabajo que las ha llenado de éxitos, sin percibir el vacío emocional que las envuelve.

La solterona: Regularmente estas chicas crecieron con un gran complejo: no son lo suficientemente atractivas para los hombres. Con esta percepción, llegan a autoconstruir un muro que las protege de cualquier cortejo. De carácter fuerte, poseen un autoestima que está por los suelos, sin encontrar reparos.