La Organización Mundial de la Salud (OMS) designó este día internacional como una manera de tomar conciencia sobre la importancia de prevenir una enfermedad que padecen miles de mujeres en el mundo.

El cáncer de mama no es algo que generalmente se pueda prevenir, y mucho menos cuando está relacionado con la genética, lo mínimo que podemos hacer es mantener un control continuo para detectar la enfermedad a tiempo y evitar que se desarrolle aún más, de ésta forma será más fácil su cura. Recuerda que existe el autoexamen, a fin de detectar cualquier anomalía.

Habitúate a realizarte masajes en los pechos, preferiblemente con aceites naturales. Esto no solo te ayudará a mantener la piel en buen estado, hidratada y elástica, sino que además te servirá para hacerte una especie de autoexamen mamario. Al realizarte masajes a menudo podrás detectar enseguida cualquier extraño bultito que comience a crecer.

Realízate revisiones cada cierto tiempo: A partir de los 35 años es altamente recomendable comenzar a acudir a controles mamarios anuales, además, a los 40 años se recomienda hacerse la primera mamografía que se repetirá cada dos años entre la edad de 40-45 y anualmente desde los 45 en adelante.

Depende de ti hacer frente a este mal, recuerda que la clave es la prevención.