Un programa educativo que cuenta con el apoyo del Gobierno británico utiliza imágenes de la cantante en bikini y compara el “antes y después” del uso del retoque digital para mostrarle a jóvenes estudiantes de entre 10 y 11 años que la perfección no existe y que las imágenes de muchas celebridades son modificadas digitalmente.

En una de las fotos, se ve a Spears en traje de baño con un cuerpo perfectamente contorneado, delgado y suave; mientras que, en la otra, se aprecia la “verdadera” Britney, con algo de celulitis, pero igualmente bella.

Paul Jackson, director de Media Smart, la organización que puso en marcha esta iniciativa, asegura que, al ver estas imágenes, las chicas se vuelven más conscientes de lo que ven. “Hay que explicarles que las fotos en los medios no son necesariamente la realidad. Intentamos hacerles ver a los chicos que no deben angustiarse al ver imágenes de perfección”, explicó en declaraciones a la BBC.

El plan de enseñanza dice: “Alentar a loa alumnas a pensar por qué las celebridades desean mostrar imágenes retocadas de sí mismos. ¿Ayudará a su carrera parecer más atractivos?”. La lección termina en una discusión sobre “la importancia de los atributos personales y los valores humanos sobre la belleza física”.