Los senos son parte importante del cuerpo de una mujer, dado que forma parte de su silueta. Estos se desarrollan durante la pubertad hasta la edad adulta, momento en el que alcanzan tamaño y forma plena.
Sin embargo, al igual que otras partes del cuerpo, los senos se encuentran propensos a diversas enfermedades.
1.- Masajes
Hacerse masajes regulares sobre los senos mientras te bañas o cambiar ayuda a activar el flujo linfático y la circulación en el tejido mamario. Debes empezar con un suave movimiento en la axila e ir hacia los dos. Finaliza presionando el pezón suavemente.
2.- Cuida tu peso
Las mujeres que sufren de obesidad tienen el doble de riesgo de padecer de cáncer de seno. Por lo tanto, se recomienda llevar una dieta balanceada que contenga gran cantidad de fibra y vitaminas.
3.- Ejercítate
Realizar ejercicios regularmente te ayuda a evitar que el sistema linfático presente obstrucciones y disminuye el riesgo de cáncer entre un 20 y 80%.
4.- Investiga sobre tus antecedentes familiares
Se dice que gran parte de los pacientes de cáncer tienen antecedentes de la enfermedad en su familia. Por ejemplo, si un familiar de primer grado ha tenido este mal el riesgo se multiplica de 2 a 5 veces.
5.- Realízate revisiones regulares
La mejor manera de prevenir una enfermedad es realizándote revisiones anuales, las cuales ayudarán a localizar cualquier cosa sospechosa y poder combatirla.
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