No por gusto es considerada una de las revelaciones del 2011 en lo que a clase y belleza se refiere. Kate Middleton ha sabido brillar con luz propia, desde su primera aparición como la novia oficial del príncipe William.

La duquesa celebra este lunes sus 30 años, convirtiéndose en toda una exponente del buen estilo europeo y que ha sabido reflejar en otras jóvenes a nivel mundial.

Desde sus siempre novedosos trucos de belleza, como sus múltiples secretos para cuidar su preciada cabellera en base a cera y mascarillas y cuidados especiales para mantener su piel siempre radiante, fueron la clave para convertirla en una de las personalidades más destacadas del año 2011.

Sin dejar de lado una boda de ensueño, que quedó en la memoria de todos con el acertado diseño que lució de la mano del prestigioso Alexander McQueen, la convirtió en la favorita de muchos, haciéndola merecedora del título a la novia más bella del año.

La siempre radiante Kate ha optado por una celebración a puerta cerrada con sus familiares y amigos más cercanos para evitar la enorme atención mediática que ella genera desde que se casó en abril pasado.