La carrera de esta niña estadounidense de Providence, Rhode Island, comenzó a los cuatro años. Su madre, Susanna Barrett, se dio cuenta del futuro prometedor que tenía su hija como reina de la belleza infantil y la inscribió en un concurso. Desde entonces, Bella, como le llaman sus padres, los ha ganado casi todos.

“¿A quién no le puede gustar ser millonario?”, se pregunta la Pequeña Miss América 2012 en una entrevista en The Mirror.

Isabella también es el rostro de una línea de juguetes de la cadena Toys R U s, pero su fama viene de haber participado con su madre en el reality show Toddlers and Tiaras, que emite la cadena TLC.

Isabella ha desarrollado gustos extravagantes: Su guardarropa alberga vestidos hechos a su medida por valor de 10 mil dólares cada uno y más de 60 pares de zapatos de diseño, porque “cada actuación tiene que ser como un espectáculo de Broadway”, afirma la señora Barrett.

Los Barrett han sido criticados por “sexualizar” a su hija y ganar dinero con ello, aunque la ley establece que tienen que ahorrar un porcentaje de los ingresos de la menor hasta que cumpla la mayoría de edad y pueda disponer de su dinero. Su madre insiste en que no presiona a su hija, sino que le ayuda a conseguir sus sueños: “Si mañana me dijera que lo quiere dejar, estaría bien”.