El delantero argentino del Barcelona, Lionel Messi, quien no estuvo en toda su magnitud el sábado pasado en el clásico ante Real Madrid, jugó infiltrado debido a un esguince en el tobillo que no le permitía entrenar con normalidad, según la prensa deportiva española.

El atacante “azulgrana” tuvo molestias con su tobillo derecho durante la semana previa al clásico, por ello el cuerpo médico del club catalán decidió infiltrarlo para que dispute el clásico español.

Sin embargo, la lesión que sufre el ariete sudamericano no es de gravedad y el futbolista podrá jugar sin complicaciones el sábado 1 de noviembre, a partir de las 14:00 (hora peruana) ante el Celta de Vigo.

Con esa derrota, Barcelona se quedó con 22 puntos y comparte la punta con el Sevilla; mientras que Real Madrid se ubica a un punto de los líderes.