El cuadro colchonero salió con todo a asegurar su clasificación a la fase de semifinales y dispuso de claras ocasiones que no pudo convertir por la falta de puntería de sus jugadores, quienes hasta en tres oportunidades estrellaron el balón en los palo.

De por sí el primer gol de Koke llegó tras un disparo al palo de Adrián López, que para fortuna del Atlético de Madrid sí pudo ser capitalizado a los siete minutos del primer tiempo.

Minutos después no sucedería lo mismo y el protagonista sería Davíd Villa, quien a los 11 minutos casi aprovecha una mala salida de Pinto, pero el palo le devolvería su remate.

El atacante español volvería a disponer de otra clara ocasión a los 19 minutos, pero el travesaño impediría que su potente disparo cruzado perfore el arco de un Barcelona, que para ese entonces no la pasaba nada bien en el Vicente Calderón.