Esto provoca que nuestro cuerpo sea algo lejano y desconocido a nosotros; no lo escuchamos cuando nos pide que paremos, le hacemos caso sólo cuando nos enfermamos, como lo explica la Psicoterapia Corporal y Desarrollo Humano (TEPAL).
Cada una de las situaciones negativas nos produce estrés, y los síntomas detonan en nuestro cuerpo un estado de tensión, que normalmente desaparece cuando esta emoción es liberada.
En este sentido la psicoterapia corporal nos ayuda a adquirir tranquilidad, vitalidad y bienestar emocional que se ven afectado por los síntomas del estrés.
La psicoterapia corporal se basa en la idea de que el cuerpo y la psique-alma no están separados, sino que forman una unidad. Así se explica también la relación entre los estados psíquicos (por ejemplo, el miedo, el estrés o estados parecidos) y los estados de salud (sudoración, sentimiento de opresión en el pecho o respiración corta, etc.).
Fuente: Salud 180