De acuerdo al experto Carlos Emilio de la Flor, la oreja o pabellón auricular se encuentra constituido por cartílago y piel, y su tamaño regular se encuentra entre los 50 a 55 milímetros.

Además de flexible, esta área de nuestra anatomía tiene una gran diversidad de terminaciones nerviosas, especialmente en el lóbulo; lo que las convierte en una zona erógena por excelencia, pero, ¿qué otra cosa podemos esperar de nuestras orejas?

Además de ser una parte que construye tu apariencia, ya que son un elemento que se decora a través de piercings, las orejas pueden revelar mucho y aquí te decimos algunas de ellas:

1. Enfermedad coronaria. Un equipo de científicos de la Universidad de Buenos Aires en Argentina, descubrió que las personas afectadas de enfermedad arterial coronaria (EAC) tienen más probabilidad de presentar un surco que cruza el lóbulo de la oreja. Se trata de un signo que podría utilizarse para un primer diagnóstico de la enfermedad.

2. Sirven cómo huellas digitales. De acuerdo con el profesor Mark Nixon, las orejas son un parámetro biométrico viable para identificar a una persona; ya que tienen una estructura estable que se mantienen desde el nacimiento hasta la edad adulta y que, en lugar de envejecer, sencillamente aumentan de tamaño, aunque su forma no se altera.

3. Te dice si eres de genética dominante o recesiva. De acuerdo a un estudio realizado por la Universidad de Arizona, las orejas suelen terminar cerca del cuello de dos maneras posibles: Pegadas al rostro, casi fundiéndose en él quiere decir que eres de genética recesiva, si están levemente separadas por una forma de gancho eres de gen dominante.

Cada parte de nuestro cuerpo revela cosas determinadas de nuestra salud y personalidad, es por ello que se vuelve necesario examinar y observar cada cambio que se presente y si es posible acudir con un especialista de la salud.

Fuente: Bienestar.salud180.com

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