La lechuga posee una gran cantidad de antioxidantes como las vitaminas A, C, E, B1, B2, B3, B9 y K. Se suele comer cruda y en ensaladas, aunque en algunos lugares la consumen cocida.
También posee un alto contenido de agua y minerales entre los que se encuentran el fósforo, hierro, calcio, potasio y aminoácidos. Pero ¿cómo influyen todos esos nutrientes? Pues nos brindan los siguientes beneficios:
1.- Combate la inflamación
Su contenido de vitamina K ayuda a reducir la hinchazón. Para tener mejores resultados puedes acompañarla con brócoli y espinacas.
2.- Mejora la salud del cerebro
Cuando enfermedades como el Alzheimer aparecen y producen la muerte de algunas neuronas se recomienda comer este alimento para controlar el avance.
3.- Ayuda a combatir el cáncer
De acuerdo con algunas investigaciones, incluir a la lechuga en tu dieta diaria te mantendrá protegido de diversos tipos de cáncer como los de la boca, la garganta, el esófago y el estómago.
4.- Controla la diabetes
El bajo índice glucémico de esta planta ayuda a disminuir el riesgo de padecer diabetes tipo 2. También, si tienes la enfermedad es una buena opción para incluir en tu alimentación.
5.- Combate el insomnio
¿Tienes problemas para dormir? Entonces, empieza a consumir un poco de ensalada de lechuga por la noche y listo.