Unos científicos en Estados Unidos indicaron en una reciente investigación que la sensación de tener mucha hambre obliga a las neuronas en el cerebro a comerse a sí mismas.

Dichos estudios en el pasado han demostrado que cuando el organismo carece de nutrición, como cuando se aplican dietas severas, las células comienzan a comer partes de sí mismas para evitar esa pérdida de sustento.

Es un proceso llamado autofagia (literalmente “comerse a sí mismo”) que forma parte del ciclo natural de la vida celular. Pero hasta ahora se pensaba que la autofagia no ocurría en el cerebro y que éste estaba protegido de este ciclo celular, informó BBC Mundo.

El proceso, dicen los expertos, ocurre en el hipotálamo, en la región cerebral encargada de regular varios procesos metabólicos, incluidos la temperatura corporal, el hambre y la sed.