La obesidad contribuye a la enfermedad cardiaca impidiendo sustancialmente el diagnóstico correcto de la enfermedad y su tratamiento, según el cardiólogo Sheldon Litwin, quien investiga el impacto de la obesidad y la pérdida de peso en la salud del corazón en la Universidad de Georgia.

Cerca de la mitad de los pacientes de Litwin tiene enfermedades cardiacas relacionadas con la obesidad, destacando la falta de aire, hipertensión y diabetes. “El problema es de una magnitud enorme. Todo, desde el diagnóstico de la enfermedad cardiaca hasta su tratamiento, se ve afectado por la obesidad”, señala Litwin.

Según el investigador, una solución puede ser la cirugía de ‘bypass’ gástrico, que estimula la pérdida de peso mucho más rápido que las modificaciones en el estilo de vida, disminuyendo así el riesgo de enfermedad cardiaca.

El Utah Obesity Study siguió a más de 1.000 personas con obesidad severa durante seis años. Alrededor de un tercio recibió una cirugía de ‘bypass’ gástrico. Tras la cirugía, estos pacientes experimentaron una pérdida de peso del 30% en comparación con los controles y tuvieron reducciones significativas en los factores de riesgo cardiovascular.

Así, los sujetos sometidos a cirugía experimentaron una reducción sana de la cámara de bombeo de su corazón y una profunda reducción en la incidencia de diabetes, presión arterial alta, los niveles elevados de lípidos y apnea del sueño.

Fuente: Abc.es