La leche es el líquido vital que la madre, en todas las especias de mamíferos, produce para alimentar a sus crías en los primeros momentos de su vida.
Por ello debe consumirse durante toda la vida, desde la infancia a la adultez, para prevenir enfermedades como la osteoporosis y mantener la salud óptima. Los expertos explican que existen diversos tipos de leche con diferentes proteínas.
Por ejemplo, el componente principal del líquido materno y de las fórmulas infantiles es la lactosérica, mientras que la de vaca tiene caseína, que genera pérdida de apetito.
Y uno de los ingredientes del lácteo que causa muchos problemas es la lactosa (un disacárido que contiene sacarosa, cerebrósidos y aminoazúcares) al provocar gases, acidez y dolor estomacal.
Las empresas dedicadas a la venta de este producto han modificado sus propiedades para evitar efectos secundarios de cada una. Aquí te presentamos las cantidades de azúcar, grasa y proteínas que tiene cada tipo de leche, así como los pros y contras de beberla.
1. Leche completa, grasa (10gr), Azúcar (14gr), Proteína (14 gr): Contiene mucha grasa.
2. Leche reducida en grasa, (7gr), Azúcar (14 gr), Proteína (10gr): Engorda.
3. Leche deslactosada, grasa (0-0.4 gr), Azúcar (14 gr.) Proteína (10 gr): Es fácil de digerir.
4. Leche descremada, grasa (0 gr), Azúcar (14 gr), Proteína (10gr): Tiene gran poder de saciedad gracias a la Caseína y su azúcar no engorda tanto como el pan.
Fuente: Salud180.com