La divertida obra teatral “TOC-TOC” acerca de un grupo de personas con trastornos obsesivo-compulsivos, es una forma simpática de acercarse a imaginar esta manera de sentir, pensar y actuar llamada obsesión compulsiva. Sin embargo, las personas que padecen este trastorno no lo pueden tomar a la ligera dado que las ideas obsesivas, acciones compulsivas, evitaciones y temores se constituyen en una limitación muy seria en sus vidas.

El TOC no necesariamente presenta sus dos componentes juntos. Una persona puede tener ideas obsesivas, es decir pensamientos que son insistentes, perseverantes, generadores de ansiedad, que asaltan al sujeto en cualquier momento.

¿Por qué aparecen estos síntomas? Las razones pueden ser múltiples. Una experiencia traumática como un accidente de tránsito, un síndrome fóbico o un cuadro depresivo –también trastornos más severos como psicosis o autismo – pueden manifestarse con componentes obsesivo-compulsivos.

Los síntomas obsesivos responden bien a la psicoterapia. Si se trata de síntomas de un TOC con un nivel de alteración de varias capacidades y generadores de una ansiedad moderada a severa, es necesario acompañar a la psicoterapia con medicaciones (psicofármacos) que, con los avances actuales de las neurociencias, traen beneficios al bienestar emocional sin mayores efectos secundarios.

Carlos Jibaja Zárate es psicoterapeuta psicoanalítico de CAPS te atiende