Una idea bastante difundida de su origen, sitúa el nacimiento de la natilla en los conventos a lo largo de Europa, aunque se desconoce la fecha.

Fue entonces un plato típico de los conventos donde siempre existió una cierta predilección por la elaboración de los dulces que iba a la par de la cultura de austeridad que allí se reinaba.

Este también es famoso por su sabor a caramelo. ¿Te animas a prepararlo? Te compartimos la para que lo prepares en simples pasos. ¡Toma nota y disfrútalo!

Ingredientes

1 kilo

2 cdta. de leche

1 cdta. de bicarbonato

1 cdta. de esencia de vainilla

2 cdta. de fécula de maíz (maicena)

Para la miel

1/2 taza de agua

1 taza de azúcar

1/2 kilo de chancaca

Modo de preparación

Empezamos preparando la miel hirviendo el agua junto con el azúcar y la chancaca.

En otra olla, hervimos la leche, agregamos la miel junto con el bicarbonato, la vainilla y la maicena disuelta en un poco de agua fría.

Movemos constantemente la preparación con una cuchara de madera hasta que espese la natilla.

Cuando haya tomado punto (que se vea el fondo de la olla) adquiere un tono oscuro, sin que se queme, retiramos del fuego y la dejamos reposar.

Podemos servir con galletas de soda o vainilla.