Desde que se lanzó en Perú, los miles de “gamers” de nuestro país han podido cumplir uno de sus tantos sueños de la infancia: atrapar pokémon en el mundo real utilizando para ello su smartphone.

Tanta conmoción ha causado Pokémon GO en , que miles de usuarios han compartido sus experiencias capturando a los diferentes tipos de pokémon que el juego ha habilitado. Uno de ellos es Braulio Malpartida.

A través de su cuenta de Facebook, Braulio compartió una peculiar historia que tiene como uno de los protagonistas a , uno de los pokémon más poderosos y anhelados por los jugadores de Pokémon GO.

Según detalló Braulio, el incidente se produjo el pasado sábado 13 de agosto de 2016, aproximadamente a las 7.20 p.m. En aquel entonces, su hermana entró a su habitación y le dijo que había un Charizard cerca.

Aunque al comienzo lo dudo, ya que por su casa solo hay Geodude y Ekans, luego de abrir el juego se percató de que era cierto: Un poderoso Charizard se encontraba muy cerca de su casa y tenía que atraparlo a como de lugar.

Luego de salir de su domicilio, el smartphone de Braulio vibra para avisarle que el Charizard estaba esperándolo; sin embargo, había un problema, solo tenía dos pokébolas, las cuales desperdicia por su mala puntería.

Aunque estuvo a punto de llorar por la impotencia, su hermana lo hizo entrar en razón y le dijo que lo acompañe a una poképarada cercana para recoger pokébolas y volver para atrapar a Charizard.

“Llegamos a la poképarada, giramos la rueda y me dan 2 Pokébolas, 1 Revivir y 1 Baya. Regresamos y el Charizard seguía ahí”, contó emocionado Braulio en su cuenta de Facebook; sin embargo, nuevamente volvió a fallar.

Sumamente decepcionado, decide retirarse; sin embargo, su hermana lo anima a ir a otra poképarada, un poco más lejana, y volver por el Charizard. Luego de pensarlo, decide hacerlo y logra conseguir 4 Pokébolas y una Súperball.

Luego de correr al mejor estilo de Usain Bolt, Braulio volvió al lugar donde se encontraba el Charizard y para su sorpresa todavía estaba ahí. Lastimosamente, perdió las 4 pokébolas que tenía; sin embargo, todavía tenía la Súperball.

Era su última oportunidad, ya no había poképaradas cerca y Charizard iba a desaparecer para siempre. Implorando no fallar, Braulio lanza la Súperball, su último intento, lamentablemente falló de nuevo.

¿Qué pasó? Según comenta Braulio, su hermana lo animó a comprar pokébolas. Luego de gastar 3.29 soles de su tarjeta de crédito pudo comprar 20 pokebolas con las que finalmente pudo atrapar a Charizard en el primer intento.

Muy emocionado por su captura, que se desarrolló en Santa Anita (distrito donde solo aparecen Geodude y Ekans, según Braulio) compartió las fotos en su cuenta de Facebook donde se han vuelto viral. ¡Qué grande!

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