quiere lanzar su nuevo dispositivo lo más rápido posible. Aunque no existe fecha concreta, y solo especulaciones, al parecer el está más cerca de lo que parece.

En marzo de este año 2017, con la presentación del Galaxy S8, Samsung introducía tres nuevos colores a su repertorio: negro, gris orquídea y plata, a los que más tarde se le sumaron los tonos rosa y rojo.

Pero ahora Samsung quiere que hayan más opciones para el usuario y así pueda obtener un con más colores. Este smartphone podría llegar en dos modelos distintos, el color negro y dorado característicos del Galaxy S8, además del azul Deep Blue que ya vimos en el Note8.

Asimismo, es posible que también apuesten por el Orchid Grey, uno de los colores muy vendidos por la marca surcoreana.

Finalmente, Samsung tiene la intención de mantener el color negro en los reducidos marcos que rodean al panel frontal, para así mantener la sensación de inmersión a la hora de utilizar la pantalla infinita del terminal.

De momento se espera que la compañía muestre un prototipo del Samsung Galaxy S9 en el CES 2018, mientras da sus últimos toques para desembarcar, quizá, en el Mobile World Congress 2018 o en marzo, en Nueva York.