La menor de 2 años de edad, de iniciales J. T. A., quien fue alcanzada por una bala perdida durante las protestas antimineras registradas en Andahuaylas, se recupera en el Instituto Nacional de Salud del Niño (exHospital del Niño).

Si bien aún no se ha precisado la fecha en que sería dada de alta, voceros de ese centro de atención señalaron a la Agencia Andina, que la niña encuentra fuera de peligro y sin necesidad de recibir atención de cuidados intensivos.

Durante los sucesos de violencia registrados durante el paro de Andahuaylas, una bala perdida atravesó el glúteo izquierdo de la pequeña, afortunadamente, sin mayores consecuencias.

El padre de la víctima corrió con su hija en brazos, pese al caos que reinaba en la ciudad debido a las protestas contra la actividad minera, y logró ingresarla a un hospital local.

Sin embargo los médicos dispusieron su traslado a Lima junto a otros cinco adultos, también, heridos en la revuelta. Según el padre de la niña, su familia no participaba de las manifestaciones y aseguró que estaba en su casa cuando una bala ingresó por una ventana.

Incluso, el ministro de Salud, Alberto Tejada, dispuso el envío de equipos médicos adicionales para reforzar la atención en la zona.

La paciente permanece internada en el quinto piso del INSN, correspondiente al área de Cirugía, y está acompañada de su padre, con quien fue trasladada desde Apurímac para recibir atención médica en la capital.