Por constituir un peligro inminente para la salud y seguridad de los vecinos, la Municipalidad de San Juan de Lurigancho pidió la clausura de la cárcel del mismo nombre y del penal Miguel Castro Castro, ubicados en esa jurisdicción.

Un acuerdo del Concejo, publicado en el diario oficial El Peruano, indica que la decisión obedece al pedido de 1,300 instituciones sociales del distrito, que consideran que ambos centros penitenciarios, por sus condiciones de hacinamiento y colapso, se han convertido en factores de riesgo tanto para los reclusos como para la población que vive en los alrededores.

El acuerdo señala que los penales se encuentran ubicados en zonas urbanas lo que genera inseguridad, zozobra y temor, y recuerda que esos establecimientos han sido escenarios de reyertas, fugas y crímenes.

Asimismo, menciona un informe de la Subgerencia de Defensa Civil de la comuna distrital, que precisa las deplorables condiciones de inseguridad en la que se encuentran los mencionados penales. Los reclusos estarían en grave riesgo en caso de un incendio, sismo o deslizamiento de rocas.

El concejo distrital autorizó a su alcalde, Carlos Burgos, a que efectúe las gestiones necesarias del caso ante la Presidencia de la República, Congreso de la República, Defensoría del Pueblo, Ministerio Público, Instituto Nacional Penitenciario y otras instancias, para hacer efectiva su erradicación.

Fuente: Perú 21