Dos mujeres fueron castigadas por enardecidos comerciantes puneños, quienes las acusaron de haber robado cuatro mil soles de una tienda de un centro comercial en Juliaca.

A los comerciantes les importó poco la presencia de los efectivos del serenazgo, ellos aplicaron la justicia con sus propias manos y tras golpear por varias veces a las mujeres, les exigieron que les digan dónde estaba el dinero.

A pesar de semejante golpiza, Nancy Almanza y Teófila Sarmiento no revelaron la ubicación del dinero.

Finalmente, las mujeres fueron rescatadas por la Policía de Juliaca y conducidas a la comisaría del sector.