Como “irreverente y sacrílego” calificó el presidente de la Conferencia Episcopal Peruana (CEP), monseñor Miguel Cabrejos, el robo de la Cruz de Motupe, por lo que demandó su recuperación inmediata.

Si bien perdonó la sacrílega actitud de los ladrones, la CEP exigió, por justicia y respeto a la propiedad y en consideración a un símbolo que representa a millones de peruanos, la inmediata devolución de este sagrado ícono religioso.

Además pidió a las autoridades policiales a poner todos sus esfuerzos para recuperar inmediatamente la cruz y que se tomen las medidas preventivas y correctivas con el fin de evitar que hechos como este se produzca nuevamente.

Cabrejos también expresó su solidaridad con monseñor Jesús Moliné, obispo de Chiclayo, y dijo que reza y espera que la cruz de Motupe sea recuperada pronto.