Dos de los efectivos policiales que perdieron la vida el pasado jueves tras el estallido de un camión cargado de artefactos pirotécnicos, en Juliaca, Puno, pidieron al presidente Ollanta Humala que no los desampare.

Ambas familias se encuentras destrozadas tras la pérdida del jefe del hogar, ya que muchos de ellos dejan hijos menores.

El próximo lunes es aniversario de Juliaca pero tras el terrible accidente se declaró duelo en la ciudad y se han cancelado toda celebración.