La Policía Nacional y el personal del Instituto Nacional Penitenciario (INPE) realizaron una requisa en los interiores del penal de Lurigancho, en donde encontraron 600 gallos de pelea, así como varias armas, cartuchos y celulares.

“En varios pabellones había una gran cantidad de jaulas de gallos. Eran gallos de pelea que han venido siendo criados por varios años. Se dispuso que hasta el día 28 de marzo los dueños tenían plazo para retirar a todos los gallos. A la fecha, el 95 por ciento de estas aves ya han sido retiradas de los pabellones”, declaró a RPP el coronel Tomás Garay, director del establecimiento penitenciario.

Sostuvo que hace muchos años, el Consejo Técnico Penitenciario formalizó el ingreso de aves al penal, porque era alguna clase de terapia, “pero lo sorprendente es la gran cantidad de animales, lo que no es correcto”.

Agregó que su gestión dispuso dejar sin efecto dicha norma y que inmediatamente las aves sean retiradas.

Asimismo, enfatizó que dentro del penal también se decomisaron cuatro armas de fuego, una retrocarga con 43 cartuchos, más de 670 celulares, 28 chips, 82 cargadores, laptops, Reproductores de DVDs y alcohol artesanal, entre otras cosas.

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