En medio del dolor de su familia y sus compañeros por su pronta partida, los restos de los que perdieron la vida en el incendio de el martes último son llevados hacia la Parroquia del Sagrario, junto a la Catedral de Lima, donde se oficiará una misa de cuerpo presente por su eterno descanso.

Rostros compungidos, lágrimas contenidas, dolor inocultable se puede observar en los rostros de sus compañeros de labor, que acompañan los féretros de Alonso Salas Chanduvi, Eduardo Jiménez Soriano y Rául Sánchez Torres, quienes son protagonistas de una de las páginas más tristes de la historia de los del Perú.

El ulular de las sirenas y el toque de silencio agregaron dramatismo al momento que no solo vivieron los familiares y compañeros sino también el ciudadano de a pie, que quiso participar del momento y acompañar el cortejo fúnebre para testimoniar así el agradecimiento y reconocimiento a estos que dieron su vida por la sociedad.

Aplausos, vivas, pétalos de flores lanzados al aire se pudieron apreciar en esta despedida de los bomberos de su casa, la Bomba Lima 2, donde pasaron gran parte de sus vidas y donde dejaron un ejemplo de civismo, solidaridad y amor al prójimo.

Luego de oficiarse el acto litúrgico, los féretros envueltos en la Bandera Peruana serán llevados a la Municipalidad de Lima donde serán condecorados y luego llevados hacia sus respectivos domicilios para estar con sus familias. Por la tarde serán sepultados en el cementerio Campo Fe de Huachipa.

despedidos con misa

El arzobispo de Lima y cardenal Juan Luis Cipriani oró hoy el eterno descanso de los bomberos fallecidos en el incendio del martes último en El Agustino y pidió para que la paz y la tranquilidad llegue a sus dolidos familiares.

“Queremos agradecer a nuestros hermano (Los bomberos), también a tantos compañeros suyos que se entrega a esta causa (…) les digo a su familia que encuentren la paz y la seguridad en Dios. No siempre ocurren estos actos heroicos en los que uno abandona la paz y la tranquilidad para. con la mayor generosidad posible, arriesgar sus vidas”, dijo el cardenal durante su homilía.

Andina

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