Películas que muestran el lado friki del circo (VIDEO)

El circo es un imán para la imaginación, pues está hecho de imaginación y fantasía. Bajo sus carpas de colores se esconden grandes historias y mitos, desde los más divertidos hasta los más oscuros. Por ello, directores de cine nunca dudaron en encontrar en el circo una fuente inagotables de relatos que pudieran llevar a la pantalla. Aquí, algunas películas que muestran un lado no tan divertido del mágico mundo del circo.

Something Wicked This Way Comes (1983)

Basada en una novela de Ray Bradbury, esta película nos muestra que a veces los circos pueden ser el escondite de una figura tan amenazante como el Diablo, quien cumple deseos con una vuelta inesperada. Su circo ambulante llega justamente a un pueblito.

Freaks (1932)

Una de las historias más extrañas del cine, este film captura la vida de los artistas diminutos y “raros” que solían tener los circos, y su exclusión social (o explotación) por parte de los circenses que se creen mejores que el talentoso grupo.

The Devil’s Carnival (2012)

Otra vez el circo como metáfora diabólica, en este caso este carnaval de figuras extrañas llega para varias personas que hicieron algún mal en su vida, y ahora tendrán que revivir de manera grotesca para salvar sus almas y las de aquellos que los rodean.

Balada Triste de Trompeta (2010)

Esta historia circense tiene todos los elementos típicos del ambiente, con la simple excepción de que todos sus protagonistas son unos completos psicópatas. Pero, más allá de eso, es un show muy entretenido para todos los fans de Álex de la Iglesia.

Agua para elefantes (2011)

En esta melosidad protagonizada por Robert Pattinson y Reese Witherspoon, todo lo peor pasa en un circo regido por la mano malvada del villano (y esposo de la protagonista), mientras que el romance de nuestros protagonistas toma la cabecera.

El Gran Pez (2003)

La obra de Tim Burton, sobre un hombre que hace de su vida un relato fantástico no es precisamente una película circense, pero el nudo de la historia se hace presente dentro de la carpa de un circo lleno de personajes melancólicos, huraños y muy extraños.