Amy, el documental sobre la cantante británica Amy Winehouse, que se estrenará en mayo durante el festival de Cannes, ya no cuenta con el apoyo de la familia de la cantante que falleció en julio del 2011, debido a que consideraron su mirada opuesta a la de los intereses familiares. “Los Winehouse quieren abrirse del proyecto de filmación sobre su muy adorada y extrañada Amy”, anunció un vocero a través de un comunicado. “Sienten que la película pierde la oportunidad de celebrar su vida y su talento y que está equivocada y contiene algunas falsedades básicas”, continúa. “Hay alegaciones en contra de la familia y el management que son infundadas y exageradas.”

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El padre de la cantante, Mitch, dijo a The Sun que sintió náuseas cuando lo vio por primera vez: “Amy hubiera estado furiosa, no es lo que ella hubiera querido”, dijo. El documental dirigido por Asif Kapadia usa material de archivo nunca visto y entrevistas para reconstruir el éxito y carrera de la cantante. En su defensa, los creadores del film dijeron: “Comenzamos con total respaldo de la familia y encaramos el proyecto con total objetividad. Hicimos 100 entrevistas a personas que conocían a Amy. La historia que el documental cuenta es una reflexión sobre nuestros descubrimientos a partir de esas entrevistas.”

Otro de los motivos por el cual la familia Winehouse estalló en rabia fue el enterarse de que se había recurrido al testimonio del ex de Amy, Blake Fielder-Civil, quien en su entrevista culpa al padre de la cantante de sus adicciones. Sin embargo, Mitch dejó en claro que ellos sostienen que el responsable es él: “le dio crack y heroína, la manipuló y condujo hacia las drogas.” A pesar de su oposición, la familia sabe que no puede hacer mucho para impedir el estreno del film. En Gran Bretaña será llevada a las salas durante julio. Sin embargo, comenzaron acciones legales contra los productores.