Si eres de las personas que van diariamente al gimnasio, hacen todos los que le marcó el entrenador y siguen la dieta al pie de la letra pero no notan ningún cambio en su cuerpo, es que seguramente algo estás haciendo mal sin darte cuenta y en esta nota te mostramos cómo solucionar el problema.

Los súper atletas siguen el sistema de entrenamiento intermitente donde confluye el sistema energético, muscular y neurológico. Este es muy fácil de realizar y aplicar y con una buena asesoría no te generará ninguna lesión.

Se trata realizar secuencias de ejercicios durante 10 a 15 segundos, pudiendo extenderlos hasta un máximo de 20 segundos, y luego, hacer pausas de entre 10 y 20 segundos. Las series o circuitos deben durar de 6 a 12 minutos, con repeticiones de 3 a 6 veces.

Es así que la fórmula para con éxito está en realizar continuas pausas durante el ejercicio. Esto genera un activación muscular mayor y, por consiguiente, un gasto calórico extra.

Por ejemplo, si realizamos una clase de este tipo de entrenamientos podríamos consumir alrededor de 350 calorías y con un desgaste menor que en otras actividades.

Siempre hay que tener en cuenta que la manera más eficiente, eficaz e inteligente de consumir calorías es teniendo una gran cantidad de musculatura activa prolongada en el tiempo.

El diario argentino Clarín señala en un artículo que no solo se utilizan ejercicios cíclicos, como correr, caminar, nadar. También se pueden incorporar rutinas de fuerza, velocidad y coordinación.

Estos períodos de trabajo cortos, además, permiten entrenar mejor y las micro pausas nos dan la capacidad de recuperarnos constantemente. Esto se da por la fuente de energía utilizada y por el mecanismo de oxidación de las grasas.

Y, cuando este sistema es combinado con ejercicios funcionales (sentadillas, flexiones de brazos, saltos) aumentaremos los beneficios.