Uno de los pilares para tener una vida saludable son los . Y una de las formas más comunes que existen es salir a correr, muy fácil y económico.

Pero, ¿correr es acaso tan simple como creemos? Es probable que al igual que varias personas, te hayas decepcionado al ver que no obtienes los resultados que esperabas. Y si todavía no encuentras la respuesta, te contamos cuáles pueden las posibles razones:

1. No varías en tu entrenamiento

Si acostumbramos a nuestro cuerpo a determinado entretenimiento, el efecto y el impacto serán cada vez menor. Esto sucede porque cada vez tu cuerpo se adaptará e implica que quemes menos calorías.

2. La intensidad no es suficiente

Que el entrenamiento sea intenso no significa que tengas que levantar pesas, ni tampoco que corras con gran velocidad, sino que combines diferentes tipos de fuerza. Puedes acudir a los entrenamientos con intervalos que incluyan mayor intensidad.

3. Los extremos no son buenos

Puede parecer que correr 5 kilómetros por días sea todo lo que necesitas para bajar de peso, pero a veces la clave no está en la cantidad sino en la calidad. Si sueles realizar un entrenamiento más intenso, pero con menor frecuencia verás los resultados.

4. Otro tipo de ejercicio aeróbico

Es importante que no te cierres solo en correr y consideres realizar otros como clases de danza o spinning. Así evitarás aburrirte de la rutina y enfrentarás cada entrenamiento con una energía diferente.