Hace más de 1,300 años que se construyó el mítico hotel y balneario Nishiyama Onsen Keiunkan, en las bellas montañas de Hayakama en Tokio, Japón. Hoy, considerado el hotel más antiguo del mundo, también se alza con el Record Guinnes de la posada de aguas termales más antigua de la historia.
En los alrededores de Nishiyama los turistas disfrutan de la naturaleza, montañas, aguas termales y una completa desconexión con el mundo. Fue fundado en el año 705 por el emperador Tenji y fue utilizado durante siglos por residentes y visitantes de Kioto, siendo más popular entre la clase militar y los artistas.
En este hotel se puede apreciar un diseño tradicional y de madera artesanal, suelos de tatami y vistas impresionantes a las montañas. Las aguas termales en los alrededores provienen de filtraciones naturales que permiten disfrutar de unos 1,600 litros de agua por minuto a 52 grados de temperatura en las pozas.
En Nashiyama los viajeros también pueden degustar de deliciosos platillos típicos de la gastronomía japonesa.
Fuente: abc.es