Siendo uno de los lugares turísticos más importantes de Australia, el majestuoso monte Uluru es uno de los íconos de Europa. Se trata de una formación rocosa compuesta de arenisca.

Es también uno de los mayores monolitos del planeta, con 350 metros de alto, 9 kilómetros de contorno y cerca de 2,5 kilómetros bajo tierra.

La imponente silueta de Uluru es visible para los viajeros aunque estén a kilómetros de distancia. Aunque acercarse y recorrerlo, como lo hacen los más aventureros, también supone una aventura difícil por la escasa vegetación, el clima excesivamente seco y un calor que puede superar los 46 grados.

Una de las mayores prácticas allí es contemplar los cambios de colores de Uluru conforme va pasando el día. Se sabe que el monte es un lugar sagrado para los aborígenes cercanos y que desde 1987 es considerado Patrimonio de la Humanidad.