Los mejores hoteles del mundo ofrecen las mejores vistas, los más completos servicios, los chefs más expertos del planeta y las construcciones más lujosas de todas. Pero, ¿alguna vez soñaste con dormir en una grúa? ¿En una prisión? ¿En un palacio de sal? Tal vez nunca, ni en sus más extraños pensamientos.

Pero hay turistas que en realidad sí pagarían mucho por esto. Por ejemplo, el hotel Langholmen, en Suecia, permitir vivir la experiencia de ser prisionero por un día. Es una antigua cárcel cerrada en 1975 que no ha sido derribada para construir un hotel, sino que se han mejorado sus instalaciones para transformarse en uno.

Para los viajeros más curiosos también está el Dog Bark Park Inn, en Estados Unidos. Un hotel en forma de perro. Como estos dos, también hay algunos otros que se reúnen en esta galería, como los hoteles más extraños del mundo.

Fuente: traveler.es

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