La Catedral de San Basilio es en realidad un templo ortodoxo ubicado en la ciudad de Moscú, en Rusia. Caracterizada por su forma de bulbo y cúpula, construida a mediados del siglo XVI.

Su nombre original es la Catedral del Manto de la Virgen sobre el Foso. Cuando el zar Iván el Terrible la construyó, lo hizo en honor a la victoria de Rusia frente al Kanato de Kazán, en ese entonces parte del Imperio de la Horda de Oro.

Esta majestuosa construcción recibe un sin fin de turistas, fascinados con su arquitectura, cada mes, quienes no dudan en tomar las mejores fotografías a cada muro. El concepto inicial era construir un grupo de capillas, cada una dedicada a cada uno de los santos en cuyo día el zar ganó una batalla, pero la construcción de una torre central unifica estos espacios en una sola catedral.