Una de las caminatas más populares e impresionantes de la Cordillera Blanca es el Circuito de la laguna Churup.

A pesar de su alto grado de dificultad, poder apreciar su belleza dejará una impresión que difícilmente se borrará de tu memoria.

La caminata a Churup se hace en un día. El tramo que se recorre es largo y rodeado de paisajes y nevados.

Al llegar allí se aprecian dos lagunas, una grande y otra pequeña. Los colores son maravillosos. Las inmensas piedras que rodean el lugar se reflejan en la laguna, que con el movimiento del Sol cambia de tonalidades, entre azul y verde.

Asimismo las paredes gigantescas de granito que bordean la fuente de agua le otorgan un ambiente muy íntimo y silencioso.

Está rodeada de queñuales, quisuares e ichu. En las cercanías se pueden observar especies típicas de la fauna andina como vizcachas, gatos monteses y diversas aves como los patos silvestres.

Justo en frente y aparentemente muy cerca, está el nevado Churup que también se refleja en la laguna. También se puede escalar, pero para eso sí hay que asesorarse, ya que es muy complicado de llegar.

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