PARQUE NACIONAL DEL MANU

El Manu le pertenece a Madre de Dios y a Cusco. Por ello se extiende tanto sobre la sierra como la selva. Es un área protegida de 2 millones de hectáreas, la más grande del Perú. Es hogar de, al menos, mil especies de pájaros, así como de árboles que sobrepasan los 40 metros de altura. Solo se puede llegar desde Cusco a través de agencias autorizadas, por avioneta o auto y, luego, tras un largo recorrido por bote.

BOSQUE DE PIEDRA DE HUAYLLAY

No es realmente un bosque, pero las formaciones rocosas recuerdan a los árboles. Queda en Pasco, en Huayllay. Esta zona fue alguna vez fondo marino y así se moldearon sus 4 mil extrañas rocas que asemejan perfiles y animales. Imperdible.

SANTUARIO HISTÓRICO BOSQUE DE PÓMAC

Este bosque seco en Lambayeque alberga más de 30 pirámides de la cultura Sicán. Además, es un punto importante para los observadores de aves, ya que hay 70 distintas especies. Los algarrobos son los señores de este santuario. En el lugar podrá visitar el Árbol Milenario, un algarrobo muy antiguo, o el mirador Las Salinas, para observar la majestuosidad del bosque. Se llega por auto, desde Chiclayo, en 40 minutos.

BOSQUE DE PINOS EN LA GRANJA PORCÓN

En Cajamarca, hace 25 años, una cooperativa cristiana empezó un proyecto de forestación que hoy es un éxito y que ha permitido que se desarrolle industria (madera, lácteos y textil). A una hora en auto hacia el norte, desde la ciudad de Cajamarca, se encuentra este bosque de pinos. Usted podrá andar a caballo, pescar su propia trucha y acampar. También tiene la opción de hospedarse en el hostal y disfrutar del restaurante que usa los insumos de la granja.

BOSQUE DE PROTECCIÓN ALTO MAYO

En este bosque de ceja de selva, en San Martín, el turismo todavía no es muy común, por lo que es el lugar perfecto para aquellos que no quieren toparse con otros viajeros. Es un paraíso para los amantes de las orquídeas, las caídas de agua y las cuevas.

Fuente: Peru21.pe