Rasputín nació en Siberia en 1869 y desde temprana edad se mostró a su pueblo como un infante con poderes sobrenaturales. Aterraba a sus compañeros con dones misterioso: sus extremidades sacudían, tenía tics físicos y siempre tenía las manos ocupadas. En se puede apreciar un video que explica la historia de este monje que no podía morir. Mira la nota.

Monje loco

En su etapa de adultez, Rasputín, entró a un monasterio para ser monje, pero nunca pudo lograr serlo. Una familia de un Zar lo buscó para curar las enfermedades que tenía su hijo. Este lo curó de su hemofilia y se dice que lo hizo mediante la hipnosis, pero otros comentan que usó magia oscura para dar solución al caso del pequeño. Esta acción lo catalogó por parte de su ciudad como el “monje loco”.

Su poder y su presencia no gustó a más de uno en su aldea. La desaprobación cogió fuerza cuando el hombre predijo la tragedia de la Primera Guerra Mundial. Desde esa predicción fue llamado brujo y se pensaba que utilizaba la magia negra para controlar a la familia del Zar. También se dijo que era un espía alemán, por eso es que quisieron asesinarlo para acabar con su poder maligno. En esta nota vamos a explicar los métodos que aplicaron los asesinos para hacer caer a Rasputín.

Acuchillamiento: en 1914, una mujer llamada Khioniya Guseva lo apuñaló en las tripas, esto para una persona común sería devastador, ya que habría sido un asesinato perfecto. Se le escuchó a la mujer exclamar “¡maté al anticristo!”, lamentablemente sus pretensiones se cayeron al ver que el hombre no murió, sobrevivió al suceso.

Veneno: en 1916, un grupo de asesinos seriales tomó la posta para poder derribar a este misterioso personaje, uno de ellos fue el príncipe Felix que lo invitó a su casa, utilizó a su mujer como puerto para seducir al monje. En este banquete se le sirvió vino y galletas con veneno, esto hubiese matado a 5 hombres, pero finalmente Rasputín siguió vivo.

Agua: desesperadamente, el 15 de diciembre de 1916 decidieron envolver su cuerpo en sábanas y arrojarlo al río Nevá. Donde fue hallado tres días después, pero ¿qué llamó más la atención de todo? Los estudios revelaron que cuando lo lanzaron al agua su cuerpo seguía vivo, pero murió por ahogamiento. Entonces, llegaron a la conclusión que Rasputín era, nada más y nada menos que, un demonio. ¿Será cierto que el “monje loco” era parte de una posesión demoníaca o es esto un cuento fantasioso? Déjanos tu opinión si te gustó la nota.

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